14. Y al instante le desapareció la lepra. Jesús le dio aviso que no lo dijera a nadie. «Vete, le dijo, preséntate al sacerdote y haz la ofrenda por tu purificación como ordenó Moisés, pues tienes que hacerles tu declaración.»





“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina