Carta de Santiago, 4
3. o si piden algo, no lo consiguen porque piden mal; y no lo consiguen porque lo derrocharían para divertirse.
3. o si piden algo, no lo consiguen porque piden mal; y no lo consiguen porque lo derrocharían para divertirse.
“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina