Apocalipsis, 11
14. El segundo ¡Ay! ya pasó. El tercero está para llegar en seguida.
14. El segundo ¡Ay! ya pasó. El tercero está para llegar en seguida.
El Capítulo 11 del Libro de Apocalipsis describe la medición del Templo de Dios, la presencia de dos testigos que profetizan y realizan milagros, la batalla contra la bestia, la resurrección de los testigos y el terremoto que destruye la décima ciudad. Aquí hay cinco versos de otros libros bíblicos que se relacionan con los temas cubiertos en Apocalipsis 11:
Zacarías 4:2-3: "Y le pregunté, ¿qué es esto? Y él me dijo: Este es el candelabro de oro, que está ante el Señor de toda la tierra. Y dos olivos están con ella, uno para la derecha del jarrón de aceite de oliva y otro a su izquierda ". Este versículo habla de una lámpara de araña dorada, que puede estar relacionada con la medición del Templo de Dios en Apocalipsis 11.
1 Reyes 17:1: "Elijah, el Tesbite, de los residentes de Gilead, dijo a Ahab, vive el Señor Dios de Israel, antes de cuya cara soy, que en estos años ni el rocío ni la lluvia habrán, sino según lo habrá según mi palabra." Los dos testigos en Apocalipsis 11 tienen el poder de cerrar el cielo para que no llueva, como lo hizo Elijah.
2 Reyes 2:11: "Y sucedió que, caminando y hablando, he aquí, un auto de fuego, con caballos de fuego, los separó el uno del otro; y Elijah subió al cielo en un torbellino". El ascenso de Elijah se puede comparar con el surgimiento de los dos testigos en Apocalipsis 11.
Daniel 7:21-22: "Miré, cuando este cuerno hizo la guerra contra los santos, y prevaleció contra ellos, hasta que llegó el viejo, e hizo justicia a los santos más altos; y llegó el momento en que los santos tuvieron el reino " Este versículo habla de la batalla contra los santos, que es similar a la batalla contra los dos testigos en Apocalipsis 11.
Isaías 26:19: "Os teus mortos viverão, juntamente com o meu corpo morto ressuscitarão. Despertai e cantai, os que habitais no pó; porque o teu orvalho, ó Deus, será como o orvalho das ervas, e a terra lançará de si los muertos." La resurrección de testigos en Apocalipsis 11 es similar a la resurrección mencionada en este versículo.
“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina
