Salmos, 144
14. que nuestros bueyes vengan bien cargados, que no haya brechas ni fugas, ni gritos de alarma en nuestras plazas.
14. que nuestros bueyes vengan bien cargados, que no haya brechas ni fugas, ni gritos de alarma en nuestras plazas.
El Salmo 144 es una canción de alabanza y oración al Señor por su fidelidad y amabilidad. En él, el salmista reconoce la grandeza de Dios y su constante ayuda en tiempos difíciles. A continuación hay cinco versos relacionados con los temas cubiertos en el Salmo 144:
Salmo 145:3: "Grande es el Señor y digno de ser alabado; su grandeza no tiene límites". El Salmo 145 es otra canción de alabanza a Dios, reconociendo su grandeza y amabilidad. Este versículo destaca la misma idea presente en el Salmo 144, que Dios es digno de alabanza y adoración.
Salmo 18:2: "El Señor es mi roca, mi fortaleza y mi liberador; mi Dios es mi roca, en quien me refugio. Él es mi escudo y el poder que me salva, mi torre". Este versículo destaca la confianza que el salmista tiene en Dios como su protector y liberador, un tema presente en el Salmo 144.
Salmo 146:5: "Feliz el que tiene el Dios de Jacob por su ayuda, cuya esperanza está en el Señor, en su Dios," este versículo enfatiza la importancia de confiar en Dios y depositar nuestra esperanza en Él, un tema presente en el Salmo 144.
Salmo 32:8: "Te instruiré y te enseñaré la forma en que debes seguir; te aconsejaré y te cuidaré". Este versículo destaca la idea de que Dios nos guía y nos ayuda a tomar las decisiones correctas, un tema presente en el Salmo 144.
Salmo 119:105: "La lámpara para mis pies es tu palabra y luz a mi manera". Este versículo destaca la importancia de la Palabra de Dios como guía para nuestras vidas, un tema presente en el Salmo 144, que habla sobre la ley de Dios y su sabiduría.
“Peçamos a São José o dom da perseverança até o final”. São Padre Pio de Pietrelcina
