Jueces, 1
20. Siguiendo las órdenes de Moisés, Hebrón fue dado a Caleb, que echó de allí a los tres hijos de Anac.
20. Siguiendo las órdenes de Moisés, Hebrón fue dado a Caleb, que echó de allí a los tres hijos de Anac.
El Capítulo 1 del Libro de Jueces describe la conquista de varias ciudades por las tribus de Israel después de la muerte de Joshua. Sin embargo, el capítulo también destaca algunos defectos de la gente de Israel, como la falta de destrucción completa de los cananeos y el pacto con algunos de ellos. Los siguientes son cinco versos relacionados con estos temas:
Números 33:55: "Pero si no expulsas a los habitantes de la tierra desde que te presentan, sucederá que aquellos que dejes serán como picadura en tus ojos y como espinas en tus ishals, y te apretarán en la tierra en la tierra en que tienes viviendo ". Este versículo destaca la importancia de la expulsión completa de los pueblos paganos de la tierra prometida, algo que Israel no pudo hacer por completo.
Joshua 23:12-13: "Porque si te rompes, y te aferras al resto de estas naciones que se han quedado entre ti, y se mezclan con ellos, y te unes con ellos, y ellos con ustedes, saben con certeza que el Señor, Tuyo Dios, no continuará expulsando a estas naciones antes que tú; más bien, estarán por bucle y por red, y azotar a tu muelle y espinas a tus ojos, hasta que perezcas de esta buena tierra que te dio al Señor, Tuyo, Dios ". Este verso advierte contra la asociación con los pueblos paganos, una práctica que Israel no pudo evitar por completo.
Números 32:23: "Pero si no lo haces, he aquí, pecaste contra el Señor; y sabes que tu pecado te encontrará". Este versículo destaca la importancia de la obediencia a Dios y las consecuencias de la desobediencia.
Éxodo 23:32-33: "No harás un pacto con ellos, ni con sus dioses. No habitarán en tu tierra, para que no pecen contra mí; porque servirás a sus dioses, que será un vínculo para ti." Este verso advierte contra el pacto con los pueblos paganos, una práctica que Israel no pudo evitar por completo.
Joshua 23:16: "Cuando violas el pacto del Señor, tu Dios, a quien te ordenó, y olvidó y sirve a otros dioses, y te inclinas a ellos, entonces la ira del Señor se iluminará contra ti, y luego perecerá, y luego perecerá de buena tierra que te dio ". Este versículo destaca las consecuencias de la infidelidad para Dios, algo que el pueblo de Israel experimentó en varias ocasiones.
“É preciso amar, amar e nada mais”. São Padre Pio de Pietrelcina
