1. Pero los israelitas cometieron una falta en lo tocante a las cosas consagradas al exterminio: Acán, hijo de Carmí, hijo de Zabdí, hijo de Zéraj, de la tribu de Judá, tomó lo que estaba consagrado al exterminio, y la ira del Señor se encendió contra los israelitas.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina