II Samuel, 3
32. Sepultaron a Abner en Hebrón. El rey lloró en voz alta sobre el sepulcro de Abner, y todo el pueblo lloraba también.
32. Sepultaron a Abner en Hebrón. El rey lloró en voz alta sobre el sepulcro de Abner, y todo el pueblo lloraba también.
“Combata vigorosamente, se está interessado em obter o prêmio destinado às almas fortes.” São Padre Pio de Pietrelcina