4. El rey de Asiria descubrió que Oseas le traicionaba -pues había enviado mensajeros a So, rey de Egipto, y no le pagaba el tributo anual-, por lo que mandó prenderlo y meterlo en la cárcel.





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina