17. Aunque Simón comprendió que Trifón trataba de engañarlo, ordenó que le mandaran el dinero y los dos hijos, para no suscitar la animosidad del pueblo, que podría decir:





“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina