11. Entonces el ángel del Señor le llamó desde el cielo y le dijo: "¡Abrahán! ¡Abrahán!". Éste respondió: "Aquí estoy".





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina