40. Y, finalmente, un cuarto imperio, que será fuerte como el hierro; el hierro lo aplasta y pulveriza todo; así aquél aplastará y pulverizará a todos los otros.





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina