I Corintios, 2
5. para que vuestra fe se fundase, no en sabiduría de hombres, sino en el poder de Dios.
5. para que vuestra fe se fundase, no en sabiduría de hombres, sino en el poder de Dios.
“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina