6. Y ahora, hermanos, supongamos que yo vaya donde vosotros hablándoos en lenguas, ¿qué os aprovecharía yo, si mi palabra no os trajese ni revelación ni ciencia ni profecía ni enseñanza?





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina