3. Tal vez los de la casa de Judá, al enterarse de todo el mal que tengo pensado hacerles, se vuelvan cada uno de su mal camino, y así yo pueda perdonarles su iniquidad y su pecado.





“As almas não são oferecidas como dom; compram-se. Vós ignorais quanto custaram a Jesus. É sempre com a mesma moeda que é preciso pagá-las”. São Padre Pio de Pietrelcina