16. ¡Den gloria al Señor, su Dios, antes que él haga oscurecer, antes que los pies de ustedes tropiecen contra las montañas del crepúsculo! Ustedes aguardan la luz, y él la cambiará en tinieblas, la convertirá en densa oscuridad.





O Pai celeste está sempre disposto a contentá-lo em tudo o que for para o seu bem”. São Padre Pio de Pietrelcina