5. y les dijo: "¡Escúchenme, levitas! Purifíquense ahora y purifiquen la Casa del Señor, el Dios de sus padres, eliminando todas las impurezas que hay en el Santuario.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina