16. Tampoco tomes a sus hijas como esposas de tus hijos, porque cuando ellas se prostituyan con sus dioses, harán que también ellos se prostituyan.





“Quando a videira se separa da estaca que a sustenta, cai, e ao ficar na terra apodrece com todos os cachos que possui. Alerta, portanto, o demônio não dorme!” São Padre Pio de Pietrelcina