Found 1754 Results for: uno

  • Lo guardaron hasta la mañana siguiente, como había ordenado Moisés, y no se estropeó ni se encontró en ello gusano alguno. (Exodo 16, 24)

  • No obstante, algunos del pueblo salieron a recogerlo, pero no lo encontraron. (Exodo 16, 27)

  • Grabad bien en vuestras mentes que el Señor os ha dado el descanso del sábado; por ello el día sexto os da pan para dos días. Quédese cada uno en su puesto, y que el séptimo día nadie salga de él". (Exodo 16, 29)

  • Y el Señor dijo a Moisés: "Pasa delante del pueblo, toma contigo algunos ancianos de Israel, lleva en la mano el bastón con el que golpeaste el Nilo, y vete. (Exodo 17, 5)

  • Como se le cansaban los brazos a Moisés, tomaron una piedra y se la pusieron debajo. Él se sentó encima, y Aarón y Jur le sostenían los brazos, uno a cada lado. De este modo los brazos de Moisés se sostuvieron en alto hasta la puesta del sol. (Exodo 17, 12)

  • y a sus dos hijos, uno de nombre Guersón, porque Moisés había dicho: "He sido un extranjero en país extranjero", (Exodo 18, 3)

  • Cuando tienen pleitos vienen a mí, y yo juzgo entre el uno y el otro, y les doy a conocer los mandatos y las leyes de Dios". (Exodo 18, 16)

  • pero el séptimo día es día de descanso en honor del Señor, tu Dios. No harás en él trabajo alguno ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni el extranjero que habita contigo. (Exodo 20, 10)

  • Si uno vende a su hija por esclava, ésta no saldrá de casa, como salen los esclavos. (Exodo 21, 7)

  • Si riñen dos hombres y uno hiere al otro con una piedra o con el puño, y éste no muere pero debe guardar cama, (Exodo 21, 18)

  • Si uno mata a palos a su esclavo o a su esclava, será severamente castigado. (Exodo 21, 20)

  • Si unos hombres se pelean y golpean a una mujer encinta haciéndola abortar, pero sin ningún daño especial, el que la ha golpeado será multado con la cantidad que el marido de la mujer pida y decidan los jueces. (Exodo 21, 22)


“Devo fazer somente a vontade de Deus e, se lhe agrado, o restante não conta.” São Padre Pio de Pietrelcina