Found 221 Results for: obra del alfarero

  • Tu pueblo será un pueblo de justos, para siempre poseerás la tierra, renuevo de la plantación del Señor, obra de mis manos, hecha para resplandecer. (Isaías 60, 21)

  • Y sin embargo, Señor, tú eres nuestro padre; nosotros somos la arcilla y tú nuestro alfarero, todos somos obra de tus manos. (Isaías 64, 7)

  • No construirán para que lo habite otro, no plantarán para que otro lo coma; porque como la duración de los árboles serán los días de mi pueblo, y mi elegidos disfrutarán de la obra de sus manos. (Isaías 65, 22)

  • Y yo pronunciaré mis sentencias contra ellas, contra toda su malicia, porque me han abandonado para quemar incienso a dioses extraños, para postrarse ante la obra de sus manos. (Jeremías 1, 16)

  • que yo impuse a vuestros padres el día en que los saqué de Egipto, horno de hierro, diciéndoles: Escuchad mi voz y poned por obra todo lo que yo os mando; entonces seréis mi pueblo y yo seré vuestro Dios (Jeremías 11, 4)

  • "Levántate y baja a casa del alfarero. Allí te comunicaré mis palabras". (Jeremías 18, 2)

  • Bajé, pues, a casa del alfarero y lo encontré haciendo un trabajo a la rueda. (Jeremías 18, 3)

  • Cuando la vasija que hacía le salía mal, como suele ocurrir con la arcilla en manos del alfarero, volvía a hacer otra vasija a su gusto. (Jeremías 18, 4)

  • "¿No puedo yo hacer con vosotros, oh casa de Israel, lo mismo que este alfarero? -dice el Señor-. Como la arcilla en mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel. (Jeremías 18, 6)

  • y les dirás: Esto dice el Señor todopoderoso: Así romperé yo a este pueblo y a esta ciudad, como se hace añicos un vaso de alfarero que ya no puede recomponerse. Y se enterrará en Tofet por falta de sitio en otra parte. (Jeremías 19, 11)

  • "Toma unas piedras grandes y, en presencia de los judíos, escóndelas en la argamasa de la obra de ladrillo que hay a la entrada del palacio del Faraón, en Tafnis, (Jeremías 43, 9)

  • ¡Maldito aquel que hace la obra del Señor con negligencia! ¡Maldito el que retira su espada de la sangre! (Jeremías 48, 10)


“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina