Found 709 Results for: medio

  • Unos tres mil cuatrocientos cincuenta kilos de plata se gastaron en la fundición de las basas del santuario y de la cortina, cien basas, a treinta y cuatro kilos y medio por basa. (Exodo 38, 27)

  • con una abertura en medio como la de una coraza, con un dobladillo de fino tejido para que no se deshilachase. (Exodo 39, 23)

  • Si sus posibilidades no llegan tampoco al par de tórtolas o de pichones, presentará como ofrenda por su pecado cuatro kilos y medio de flor de harina sin mezclar aceite ni poner incienso, pues es un sacrificio por el pecado. (Levítico 5, 11)

  • "Ésta será la ofrenda que Aarón y sus hijos harán al Señor el día de su consagración: cuatro kilos y medio de flor de harina como ofrenda perpetua, mitad por la mañana y mitad por la tarde. (Levítico 6, 13)

  • y podáis enseñar a los israelitas todos los preceptos que el Señor les ha dado por medio de Moisés". (Levítico 10, 11)

  • El leproso andará harapiento, despeinado, la cara medio tapada y gritando: ¡Impuro, impuro! (Levítico 13, 45)

  • El día octavo tomará dos corderos sin defecto, una cordera de un año sin defecto, trece kilos de flor de harina amasada con aceite para la ofrenda y medio litro de aceite. (Levítico 14, 10)

  • tomará uno de los corderos y lo ofrecerá como sacrificio de reparación con el medio litro de aceite, y hará con ellos el rito de presentación delante del Señor. (Levítico 14, 12)

  • Tomará luego el medio litro de aceite, echará un poco en la palma de la mano izquierda, (Levítico 14, 15)

  • Si es pobre y no puede procurarse las víctimas ordinarias, tomará un solo cordero como sacrificio de reparación para el rito de presentación y para hacer sobre él el rito de absolución; cuatro kilos y medio de flor de harina amasada con aceite para ofrenda; medio litro de aceite; (Levítico 14, 21)

  • El sacerdote tomará el cordero del sacrificio de reparación y el medio litro de aceite y los ofrecerá al Señor con el rito de presentación. (Levítico 14, 24)

  • Así, pues, enseñaréis a los israelitas a purificarse de sus inmundicias, para que no mueran contaminando con ellas mi morada, que está en medio de ellos. (Levítico 15, 31)


“A sua casa deve ser uma escada para o Céu”. São Padre Pio de Pietrelcina