Found 18 Results for: guarde

  • José alzó los ojos y vio a Benjamín, su hermano materno, y preguntó: "¿Es éste vuestro hermano menor, del que me hablasteis?". Y a él le dijo: "Dios te guarde, hijo mío". (Génesis 43, 29)

  • Moisés les dijo: "Nadie guarde para mañana". (Exodo 16, 19)

  • Si uno da a otro dinero o utensilios para que los guarde y éstos son robados de su casa, si se encuentra al ladrón, restituirá el doble. (Exodo 22, 6)

  • Que el Señor te bendiga y te guarde. (Números 6, 24)

  • Concede a mi hijo Salomón un corazón perfecto para que guarde tus mandamientos, tus preceptos y tus leyes, para que los ponga en práctica y construya el templo que yo te he preparado". (I Crónicas 29, 19)

  • Le respondió: "De acuerdo. Le acompañaré. No temas. Sanos y salvos partimos, y sanos y salvos volveremos, pues el camino es seguro". Tobit le dijo: "Buen viaje, hermano". Y a su hijo: "Prepara, hijo mío, todo lo necesario para el viaje y parte con tu hermano. Que el Dios del cielo os guarde y os traiga de nuevo sanos y salvos. Que su ángel os acompañe y os proteja en el camino, hijo mío". Antes de partir, Tobías besó a sus padres. Tobit le dijo: "¡Buen viaje!". (Tobías 5, 17)

  • Enmudecí, guardé silencio; callé, pero fue en vano, pues mi dolor se hizo insoportable, mi corazón ardía dentro de mí; (Salmos 39, 3)

  • Haz bien a tu siervo para que viva y guarde tu palabra; (Salmos 119, 17)

  • Hijo mío, no olvides mi enseñanza, y que tu corazón guarde mis preceptos; (Proverbios 3, 1)

  • Él me instruía diciéndome: "Que tu corazón guarde mis palabras, observa mis preceptos y vivirás. (Proverbios 4, 4)

  • No os fijéis en que soy morena; es que el sol me ha bronceado. Los hijos de mi madre, airados contra mí, me pusieron a guardar sus viñas; y mi viña, la mía, no la guardé. (Cantar 1, 6)

  • Escuchad, hijos, la instrucción de mi boca; quien la guarde no será confundido. (Eclesiástico 23, 7)


“Imitemos o coração de Jesus, especialmente na dor, e assim nos conformaremos cada vez mais e mais com este coração divino para que, um dia, lá em cima no Céu, também nós possamos glorificar o Pai celeste ao lado daquele que tanto sofreu”. São Padre Pio de Pietrelcina