Found 53 Results for: segunda

  • Le llamaron por segunda vez al hombre que había sido ciego y le dijeron: «Da gloria a Dios. Nosotros sabemos que ese hombre es un pecador.» (Juan 9, 24)

  • Vuelve a decirle por segunda vez: «Simón de Juan, ¿me amas?» Le dice él: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Le dice Jesús: «Apacienta mis ovejas.» (Juan 21, 16)

  • la segunda vez José se dio a conocer a sus hermanos y conoció Faraón el linaje de José. (Hechos 7, 13)

  • La voz le dijo por segunda vez: «Lo que Dios ha purificado no lo llames tú profano.» (Hechos 10, 15)

  • Me dijo por segunda vez la voz venida del cielo: "Lo que Dios ha purificado no lo llames tú profano." (Hechos 11, 9)

  • Pasaron la primera y segunda guardia y llegaron a la puerta de hierro que daba a la ciudad. Esta se les abrió por sí misma. Salieron y anduvieron hasta el final de una calle. Y de pronto el ángel le dejó. (Hechos 12, 10)

  • Con este convencimiento quería yo ir primero donde vosotros a fin de procuraros una segunda gracia, (II Corintios 1, 15)

  • Ya lo tengo dicho a los que anteriormente pecaron y a todos los demás, y vuelvo a decirlo de antemano ahora que estoy ausente, lo mismo que la segunda vez estando presente: Si vuelvo otra vez, obraré sin miramientos, (II Corintios 13, 2)

  • Pues si aquella primera fuera irreprochable, no habría lugar para una segunda. (Hebreos 8, 7)

  • Pero en la segunda parte entra una vez al año, y solo, el Sumo Sacerdote, y no sin sangre que ofrecer por sí mismo y por los pecados del pueblo. (Hebreos 9, 7)

  • así también Cristo, después de haberse ofrecido una sola vez para quitar los pecados de la multitud, se aparecerá por segunda vez sin relación ya con el pecado a los que le esperan para su salvación. (Hebreos 9, 28)

  • Esta es ya, queridos, la segunda carta que os escribo; en ambas, con lo que os recuerdo, despierto en vosotros el recto criterio. (II Pedro 3, 1)


“Não desperdice suas energias em coisas que geram preocupação, perturbação e ansiedade. Uma coisa somente é necessária: elevar o espírito e amar a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina