Found 71 Results for: interpretación de sueños

  • no escucharás las palabras de ese profeta o de ese vidente en sueños. Es que Yahveh vuestro Dios os pone a prueba para saber si verdaderamente amáis a Yahveh vuestro Dios con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma. (Deuteronomio 13, 4)

  • Ese profeta o vidente en sueños deberá morir por haber predicado la rebelión contra Yahveh tu Dios - que te sacó del país de Egipto y te rescató de la casa de servidumbre - para apartarte del camino que Yahveh tu Dios te ha mandado seguir. Así harás desaparecer el mal de en medio de ti. (Deuteronomio 13, 6)

  • Consultó Saúl a Yahveh, pero Yahveh no le respondió ni por sueños ni por los urim , ni por los profetas. (I Samuel 28, 6)

  • Samuel dijo a Saúl: «¿Por qué me perturbas evocándome?» Respondió Saúl: «Estoy en grande augustia; los filisteos mueven guerra contra mí, Dios se ha apartado de mí y ya no me responde ni por los profetas ni en sueños. Te he llamado para que me indiques lo que debo hacer.» (I Samuel 28, 15)

  • En Gabaón Yahveh se apareció a Salomón en sueños por la noche. Dijo Dios: «Pídeme lo que quieras que te dé.» (I Reyes 3, 5)

  • con sueños entonces tú me espantas, me sobresaltas con visiones. (Job 7, 14)

  • En sueños, en visión nocturna, cuando un letargo cae sobre los hombres, mientras están dormidos en su lecho, (Job 33, 15)

  • Porque, los sueños vienen de las muchas tareas. la voz necia, de las muchas palabras. (Eclesiastés 5, 2)

  • Cuantos los sueños, tantas las vanidades y las muchas palabras. Pero tú teme a Dios. (Eclesiastés 5, 6)

  • Que los hijos nacidos de sueños culpables son testigos, en su examen, de la maldad de los padres. (Sabiduría 4, 6)

  • Entonces, de repente, sueños y horribles visiones les sobresaltaron, les sobrevinieron terrores imprevistos. (Sabiduría 18, 17)

  • pues los sueños que les habían pertubado, se lo habían indicado a tiempo para que no muriesen sin saber la razón de su desgracia. (Sabiduría 18, 19)


“Onde não há obediência, não há virtude. Onde não há virtude, não há bem, não há amor; e onde não há amor, não há Deus; e sem Deus não se chega ao Paraíso. Tudo isso é como uma escada: se faltar um degrau, caímos”. São Padre Pio de Pietrelcina