Found 328 Results for: guerra santa

  • Se elegían dioses nuevos; por entonces la guerra en las puertas; ni un escudo se ve ni una lanza para 40.000 en Israel! (Jueces 5, 8)

  • Dijeron a Jefté: «Ven, tú serás nuestro caudillo en la guerra con los ammonitas.» (Jueces 11, 6)

  • Cuando vi que nadie venía a ayudarme, arriesgué la vida, marché contra los ammonitas y Yahveh los entregó en mis manos. ¿Por qué, pues, habéis subido hoy contra mí para hacerme la guerra?» (Jueces 12, 3)

  • Los seiscientos hombres danitas con sus armas de guerra estaban en el umbral de la puerta. (Jueces 18, 16)

  • La gente de Israel hizo también el censo. Sin contar a Benjamín, eran 400.000 armados de espada; todos hombres de guerra. (Jueces 20, 17)

  • Los empleará como jefes de mil y jefes de cincuenta; les hará labrar sus campos, segar su cosecha, fabricar sus armas de guerra y los arreos de sus carros. (I Samuel 8, 12)

  • Se levantó Samuel y partió de Guilgal para seguir su camino. Los que quedaban del pueblo subieron tras Saúl al encuentro de los hombres de guerra, y vino de Guilgal a Gueba de Benjamín. Saúl pasó revista a las tropas que tenía con él: había unos seiscientos hombres. (I Samuel 13, 15)

  • Hubo una guerra encarnizada contra los filisteos toda la vida de Saúl. En cuanto Saúl veía un hombre fuerte y valeroso, se lo incorporaba. (I Samuel 14, 52)

  • Yahveh te ha enviado por el camino y te ha dicho: "Vete, y consagra al anatema a estos pecadores, los amalecitas, hazles la guerra hasta el exterminio". (I Samuel 15, 18)

  • Reunieron los filisteos sus tropas para la guerra y se concentraron en Soko de Judá, acampando entre Soko y Azeca, en Efes Dammim. (I Samuel 17, 1)

  • Los tres hijos mayores de Jesé se fueron a la guerra con Saúl; el nombre de los tres hijos suyos que marcharon a la guerra era Eliab, el primogénito, Abinadab, el segundo, y Sammá, el tercero. (I Samuel 17, 13)

  • Se levantó David de madrugada, dejó el rebaño al guarda y, tomado las cosas, se fue como le había mandado Jesé, y llegó al círculo del campamento justo cuando salía el ejército para ordenarse en batalla, lanzando el grito de guerra. (I Samuel 17, 20)


“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina