Found 169 Results for: culto a Baal

  • Cuidad bien que no se pervierta vuestro corazón y os descarriéis a dar culto o otros dioses, y a postraros ante ellos; (Deuteronomio 11, 16)

  • Suprimiréis todos los lugares donde los pueblos que vais a desalojar han dado culto a sus dioses, en lo alto de los montes, en las colinas, y bajo todo árbol frondoso; (Deuteronomio 12, 2)

  • algunos hombres, malvados, salidos de tu propio seno, han seducido a sus conciudadanos diciendo: «Vamos a dar culto a otros dioses», desconocidos de vosotros, (Deuteronomio 13, 14)

  • Pero si tu corazón se desvía y no escuchas, si te dejas arrastrar a postrarte ante otros dioses y a darles culto, (Deuteronomio 30, 17)

  • cuando yo les lleve a la tierra que bajo juramento prometí a sus padres, tierra que mana leche y miel, y ellos, después de comer hasta hartarse y engordar bien, se vuelvan hacia otros dioses, les den culto, y a mí me desprecien y rompan mi alianza. (Deuteronomio 31, 20)

  • Desde el monte Pelado, que sube hacia Seír, hasta Baal Gad en el valle del Líbano, al pie del monte Hermon, apreso a todos sus reyes y los hirió de muerte. (Josué 11, 17)

  • Estos son los reyes del país, vencidos por Josué y los israelitas, del lado occidental del Jordán, desde Baal Gad, en el valle del Líbano, hasta el monte Pelado, que se alza hacia Seír, y cuya tierra repartió Josué en herencia a las tribus de Israel según sus suertes: (Josué 12, 7)

  • luego el país de los guiblitas con todo el Líbano hacia la salida del sol, desde Baal Gad, al pie del monte Hermón, hasta la Entrada de Jamat. (Josué 13, 5)

  • Jesbón con todas las ciudades situadas en el llano: Dibón, Bamot, Baal, Bet Baal Meón, (Josué 13, 17)

  • Quiryat Baal, que es Quiryat Yearim, y Harabbá: dos ciudades con sus aldeas. (Josué 15, 60)

  • Torcía el límite y volvía por el oeste hacia el sur, desde el monte que está al lado meridional de Bet Jorón, para ir a salir hacia Quiryat Baal, que es Quiryat Yearim, ciudad de los hijos de Judá. Ese era el lado oeste. (Josué 18, 14)

  • sino para que sea testigo entre nosotros y vosotros y entre nuestros descendientes después de nosotros, de que rendimos culto a Yahveh en su presencia con nuestros holocaustos, nuestras víctimas y nuestros sacrificios de comunión. Así no podrán decir mañana vuestros hijos a los nuestros: "No tenéis parte con Yahveh." (Josué 22, 27)


“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina