Found 114 Results for: ofrendas quemadas

  • Cuando vieron el Santuario desolado, el altar profanado, las puertas completamente quemadas, las malezas crecidas en los atrios como en un bosque o en una montaña, y las salas destruidas, (I Macabeos 4, 38)

  • Así como Moisés oró al Señor y bajó fuego del Cielo, que devoró las ofrendas del sacrificio, así también cuando oró Salomón, bajó fuego y consumió la víctima. (II Macabeos 2, 10)

  • Los mismos hechos se narraban en los archivos y en las Memorias de Nehemías, donde se relataba, además, cómo este fundó una biblioteca, en la que reunió los libros que tratan de los reyes, los libros de los profetas y los de David, así como también las cartas de los reyes sobre las ofrendas. (II Macabeos 2, 13)

  • El altar estaba repleto de ofrendas ilegítimas, proscritas por la Ley. (II Macabeos 6, 5)

  • Teme al Señor y glorifica al sacerdote, dale su parte, como se te ha mandado: las primicias, el sacrificio de reparación y el lomo de las víctimas, las ofrendas consagradas y la primicia de las cosas santas. (Eclesiástico 7, 31)

  • En la medida de tus recursos, vive bien, hijo mío, y presenta al Señor ofrendas dignas. (Eclesiástico 14, 11)

  • El Altísimo no acepta las ofrendas de los impíos, y no es por el número de víctimas que perdona los pecados. (Eclesiástico 34, 19)

  • No me sigan trayendo vanas ofrendas; el incienso es para mí una abominación. Luna nueva, sábado, convocación a la asamblea... ¡no puedo aguantar la falsedad y la fiesta! (Isaías 1, 13)

  • No me trajiste el cordero de tus holocaustos ni me honraste con tus sacrificios; yo no te abrumé exigiéndote ofrendas ni te cansé reclamándote incienso. (Isaías 43, 23)

  • Las piedras lisas del torrente son tu parte: ¡sí, ellas te han tocado en suerte! En su honor has derramado libaciones, has presentado ofrendas, y yo ¿me dejaré aplacar con esas cosas? (Isaías 57, 6)

  • Les escribieron lo siguiente: Aquí les enviamos dinero; compren con él víctimas para los holocaustos y los sacrificios por el pecado, y también incienso; hagan ofrendas y preséntenlas sobre el altar del Señor, nuestro Dios. (Baruc 1, 10)

  • Si se los pone de pie, no se mueven por sí mismos; si se los inclina, no se pueden enderezar; como a muertos se les presentan las ofrendas. (Baruc 6, 26)


“Temos muita facilidade para pedir, mas não para agradecer”. São Padre Pio de Pietrelcina