Found 182 Results for: Servicio del Tabernáculo

  • Ellos le hablaron así: "Si hoy te comportas como servidor de este pueblo, si te pones a su servicio y les respondes con buenas palabras, serán siempre tus servidores". (I Reyes 12, 7)

  • Eliseo dio media vuelta, tomó la yunta de bueyes y los inmoló. Luego, con los arneses de los bueyes, asó la carne y se la dio a su gente para que comieran. Después partió, fue detrás de Elías y se puso a su servicio. (I Reyes 19, 21)

  • En una de sus incursiones, los arameos se habían llevado cautiva del país de Israel a una niña, que fue puesta al servicio de la mujer de Naamán. (II Reyes 5, 2)

  • Luego les impartió esta orden: "Van a hacer lo siguiente: Un tercio de ustedes, el que entra de servicio el día sábado y custodia la casa del rey, (II Reyes 11, 5)

  • Los dos cuerpos formados por los que dejan el servicio el día sábado, montarán guardia en la Casa del Señor, junto al rey. (II Reyes 11, 7)

  • Los centuriones ejecutaron exactamente todo lo que les había ordenado el sacerdote Iehoiadá. Cada uno de ellos tomó a sus hombres -los que entraban de servicio y los que eran relevados el día sábado- y se presentaron ante el sacerdote Iehoiadá. (II Reyes 11, 9)

  • El día siete del quinto mes -era el decimonoveno año de Nabucodonosor, rey de Babilonia- Nebuzaradán, comandante de la guardia, que prestaba servicio ante el rey de Babilonia, entró en Jerusalén. (II Reyes 25, 8)

  • En la ciudad apresó también a un eunuco, que estaba al frente de los hombres de guerra, a cinco hombres del servicio personal del rey que fueron sorprendidos en la ciudad, al secretario del jefe del ejército, encargado de enrolar al pueblo del país, y a sesenta hombres del pueblo que estaban dentro de la ciudad. (II Reyes 25, 19)

  • Ellos eran alfareros y habitaban en Netaím y Guederá; vivían allí con el rey, trabajando a su servicio. (I Crónicas 4, 23)

  • Ellos servían como cantores ante la Morada -la Carpa del Encuentro- hasta que Salomón edificó el Templo del Señor en Jerusalén, y prestaban servicio conforme a su reglamento. (I Crónicas 6, 17)

  • Sus hermanos, los levitas, estaban encargados de todo el servicio de la Morada de la Casa de Dios. (I Crónicas 6, 33)

  • Todos estos fueron descendientes de Aser, jefes de familias, guerreros selectos y valerosos, jefes entre los príncipes. Al ser registrados para el servicio militar, su número alcanzó a 26.000 hombres. (I Crónicas 7, 40)


“Quanto maiores forem os dons, maior deve ser sua humildade, lembrando de que tudo lhe foi dado como empréstimo.”(Pe Pio) São Padre Pio de Pietrelcina