Found 71 Results for: trabajos de metal

  • "Hijo de hombre, la gente de Israel se ha convertido para mí en un metal impuro. Son como el cobre, el estaño, el hierro o el plomo, a los que hay que pasar por el fuego porque son metales impuros. (Ezequiel 22, 18)

  • Por eso, esto dice Yavé: Los reuniré en Jerusalén como se hace con el metal impuro. (Ezequiel 22, 19)

  • Más aún, te has levantado contra el Señor del Cielo, has mandado traer los vasos de su Templo, y con tus invitados has bebido vino en ellos. Has brindado a todos tus dioses de metal y de madera y de piedra, que no ven, ni oyen, ni entienden, pero no has glorificado al Dios de quien dependen tu vida y tu porvenir. (Daniel 5, 23)

  • Y todavía siguen pecando, pues se han fabricado con su plata un ídolo de metal fundido, diseñado a su gusto. Esto no es más que obra de artesanos, pero ellos dicen: «Ofrezcanles sacrificios», y hombres como ellos besan a un ternero. (Oseas 13, 2)

  • ¿De qué sirve una estatua, para qué se esculpen imágenes? Imagen de metal fundido: cosa engañosa. ¿Cómo su autor puede poner en ella su confianza? Pues no es más que un ídolo mudo. (Habacuc 2, 18)

  • pero Pablo consideraba que no debían llevar consigo a quien los había abandonado en Panfilia, cuando debía haber compartido sus trabajos. (Hecho de los Apóstoles 15, 38)

  • Trabajos y agotamiento, con noches sin dormir, con hambre y sed, con muchos días sin comer, con frío y sin abrigo. (2º Carta a los Corintios 11, 27)

  • Recuerden, hermanos, nuestros trabajos y fatigas. Mientras les predicábamos el Evangelio de Dios, trabajábamos noche y día para no ser una carga para ninguno. (1º Carta a los Tesalonicenses 2, 9)

  • y el que entre en ese descanso descansará de todos sus trabajos, como lo hizo Dios. (Carta a los Hebreos 4, 10)

  • Tengan cuidado, para que no pierdan el fruto de sus trabajos, sino que reciban el pleno salario. (2º Carta de Juan 1, 8)

  • ¡En una hora se acabó tanta riqueza!» Todos los capitanes, navegantes, marineros y cuantos se ocupan en los trabajos del mar, se detuvieron a distancia (Apocalipsis 18, 17)


“Pobres e desafortunadas as almas que se envolvem no turbilhão de preocupações deste mundo. Quanto mais amam o mundo, mais suas paixões crescem, mais queimam de desejos, mais se tornam incapazes de atingir seus objetivos. E vêm, então, as inquietações, as impaciências e terríveis sofrimentos profundos, pois seus corações não palpitam com a caridade e o amor. Rezemos por essas almas desafortunadas e miseráveis, para que Jesus, em Sua infinita misericórdia, possa perdoá-las e conduzi-las a Ele.” São Padre Pio de Pietrelcina