Found 205 Results for: cinco

  • Tomó también a un funcionario de la ciudad que era inspector de los hombres de guerra, a cinco de los servidores del servicio doméstico del rey, que se encontraban en la ciudad, al secretario del jefe del ejército, encargado del alistamiento de los ciudadanos, y a sesenta ciudadanos más que se hallaban en la ciudad. (2 Reyes 25, 19)

  • Tamar, nuera de Judá, le dio a luz a Fares y Zéraj. Todos los hijos de Judá fueron cinco. (1 Crónicas 2, 4)

  • Hijos de Zéraj: Zimrí, Hetán, Hemán, Calcol y Darda, en total cinco. (1 Crónicas 2, 6)

  • Hijos de Mesulam: Hasubá, Ohel, Berequías, Hasadías y Yusab-Jesed: cinco. (1 Crónicas 3, 20)

  • También sus aldeas: Etam, Ain, Rimmón, Toquen y Asán, cinco ciudades, (1 Crónicas 4, 32)

  • Hijos de Bela: Esbón, Uzí, Uzziel, Yerimot e Irí: cinco jefes de las casas paternas, esforzados guerreros, inscritos en las genealogías en número de veintidós mil treinta y cuatro. (1 Crónicas 7, 7)

  • Mató también a un egipcio que tenía cinco codos de altura; el egipcio tenía en su mano una lanza del tamaño de un enjullo de telar. Arremetió contra él con un palo, le arrebató la lanza que tenía en la mano, y con la misma lo mató. (1 Crónicas 11, 23)

  • se comprometieron a dar, para el servicio de la Casa de Dios, cinco mil talentos de oro, diez mil monedas de oro y diez mil talentos de plata, dieciocho mil talentos de bronce y cien mil talentos de hierro. (1 Crónicas 29, 7)

  • Las alas de los querubines se extendían por todo el largo, es decir, veinte codos. Cada ala tenía cinco codos; una tocaba la pared de la sala; la otra tocaba el ala del otro querubín. (2 Crónicas 3, 11)

  • El ala del segundo querubín era de cinco codos y tocaba la pared de la sala; la otra ala tenía también cinco codos y estaba pegada con el ala del primer querubín. (2 Crónicas 3, 12)

  • Delante de la sala hizo dos columnas de treinta y cinco codos de alto. El capitel que las coronaba tenía cinco codos. (2 Crónicas 3, 15)

  • Hizo una gran pileta de metal fundido, llamado el mar, de diez codos de borde a borde, enteramente redondo y de cinco codos de alto. Un cordón de treinta codos medía su contorno. (2 Crónicas 4, 2)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina