Jeremías, 2
34. Hasta en los bordes de tu vestido se encuentra sangre de gente pobre, inocente, que tú no habías sorprendido perforando una pared. Y a pesar de todo esto,
34. Hasta en los bordes de tu vestido se encuentra sangre de gente pobre, inocente, que tú no habías sorprendido perforando una pared. Y a pesar de todo esto,
“Devemos odiar os nossos pecados, visto que o amor ao Senhor significa paz”. São Padre Pio de Pietrelcina