27. Después, los sacerdotes levíticos se pusieron a bendecir al pueblo: su voz fue escuchada y su oración llegó hasta la santa morada de Dios en el cielo.





“Quando Jesus vem a nós na santa comunhão, encontra alegria em Sua criatura. Por nossa parte, procuremos Nele a nossa alegria.” São Padre Pio de Pietrelcina