19. Tú dices: ‘He derrotado a Edóm’, y por eso tu corazón se ha engreído y se gloría. ¡Quédate ahora en tu casa! ¿Para qué comprometerte en una guerra desastrosa y sucumbir, tú y Judá contigo?".





“O verdadeiro servo de Deus é aquele que usa a caridade para com seu próximo, que está decidido a fazer a vontade de Deus a todo custo, que vive em profunda humildade e simplicidade”. São Padre Pio de Pietrelcina