Proverbios, 8
24. Cuando el abismo no existía, fui yo engendrada; cuando no había fuentes, ricas en aguas.
24. Cuando el abismo no existía, fui yo engendrada; cuando no había fuentes, ricas en aguas.
“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina