24. Pues para que sepáis que el hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados, dijo al paralítico: Tú, levántate, carga con tu camilla y vete a tu casa".





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina