Job, 12
6. ¡En cambio, están tranquilas las tiendas de los saqueadores, plena seguridad para los que provocan a Dios y creen meterlo en su puño!
6. ¡En cambio, están tranquilas las tiendas de los saqueadores, plena seguridad para los que provocan a Dios y creen meterlo en su puño!
“Todas as graças que pedimos no nome de Jesus são concedidas pelo Pai eterno.” São Padre Pio de Pietrelcina