4. Después, postrados en tierra, pedían al Señor que no volvieran ya a caer jamás en semejantes males; sino que, si de nuevo cometían la iniquidad, los castigara él mismo blandamente, sin entregarlos de nuevo en manos de gentiles, salvajes y blasfemos.





“Padre Pio disse a um filho espiritual: Trabalhe! Ele perguntou: No que devo trabalhar, Padre? Ele respondeu: Em amar sempre mais a Jesus!” São Padre Pio de Pietrelcina