Ezequiel, 46
19. Luego, por la entrada que está al lado de la puerta me llevó a las salas del santuario reservadas a los sacerdotes, las que dan al norte. Allí en el fondo había un espacio reservado, hacia occidente.
19. Luego, por la entrada que está al lado de la puerta me llevó a las salas del santuario reservadas a los sacerdotes, las que dan al norte. Allí en el fondo había un espacio reservado, hacia occidente.
“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina