I Reyes, 8
46. Cuando pequen contra ti, pues no hay hombre que no peque, y tú irritado contra ellos los entregues al enemigo, y sus conquistadores los lleven al país enemigo, lejano o próximo,
46. Cuando pequen contra ti, pues no hay hombre que no peque, y tú irritado contra ellos los entregues al enemigo, y sus conquistadores los lleven al país enemigo, lejano o próximo,
“Ouço interiormente uma voz que constantemente me diz: Santifique-se e santifique!” São Padre Pio de Pietrelcina