23. a los babilonios y a todos los caldeos, los de Pecod, de Soa y de Coa, y con ellos a todos los asirios, jóvenes apuestos, gobernadores y prefectos, todos ellos escuderos de título y hábiles caballeros;





“O grau sublime da humildade é não só reconhecer a abnegação, mas amá-la.” São Padre Pio de Pietrelcina