9. Cuando ustedes, en su propia tierra, tengan que combatir contra un enemigo que venga a atacarlos, deberán tocar las trompetas profiriendo aclamaciones, y el Señor, su Dios, se acordará de ustedes, y se verán libres de sus enemigos.





“O amor nada mais é do que o brilho de Deus nos homens”. São Padre Pio de Pietrelcina