Sirácides (Eclesiástico), 26
15. Una mujer modesta es doblemente encantadora, la que es casta es un tesoro inestimable.
15. Una mujer modesta es doblemente encantadora, la que es casta es un tesoro inestimable.
“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina