23. Moisés, pues, hablá a los hijos de Israel, que sacaron al blasfemo fuera del campamento y lo apedrearon. Lo hicieron tal como Yavé lo había mandado a Moisés.





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina