Job, 15
15. Si Dios no confía ni en sus santos, y hasta los cielos no son puros a sus ojos,
15. Si Dios no confía ni en sus santos, y hasta los cielos no son puros a sus ojos,
“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina