21. Pero elige entre los hombres del pueblo algunos que sean valiosos y que teman a Dios, hombres íntegros y que no se dejen sobornar, y los pondrás al frente del pueblo como jefes de mil, de cien, de cincuenta o de diez.





“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina