16. Entonces salió el pueblo y saquearon el campamento de los arameos. La medida de harina se vendió en una moneda de plata, y la doble medida de cebada también se vendió por una moneda, como lo había dicho Eliseo.





“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina