Encontrados 1332 resultados para: van

  • Se agacha, se acuesta, como león, como leona, ¿quién le hará levantar? ¡Bendito el que te bendiga! ¡Maldito el que te maldiga!» (Números 24, 9)

  • Lo veo, aunque no para ahora, lo diviso, pero no de cerca: de Jacob avanza una estrella, un cetro surge de Israel. Aplasta las sienes de Moab, el cráneo de todos los hijos de Set. (Números 24, 17)

  • Luego se levantó Balaam, y se fue de vuelta a su país. También Balaq se fue por su camino. (Números 24, 25)

  • Al verlos Pinjás, hijo de Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, se levantó de entre la comunidad, lanza en mano, (Números 25, 7)

  • Respondió Moisés a los hijos de Gad y a los hijos de Rubén: «¿Es que vuestros hermanos van a ir al combate y vosotros os vais a quedar aquí? (Números 32, 6)

  • Pero tus siervos, todos los que llevan armas, pasarán delante de Yahveh, para ir a la guerra, como dice mi Señor.» (Números 32, 27)

  • y les dijo Moisés: «Si los hijos de Gad y los hijos de Rubén, todos los que llevan armas, pasan con vosotros el Jordán, para combatir delante de Yahveh, y la tierra queda dominada por vosotros, les daréis el país de Galaad en propiedad. (Números 32, 29)

  • Pero si los que llevan armas no pasan con vosotros, tendrán su herencia entre vosotros en el país de Canaán.» (Números 32, 30)

  • Y ahora, levantaos y pasad el torrente Zéred.» Y pasamos el torrente Zéred. (Deuteronomio 2, 13)

  • Levantaos, partid y pasad el torrente Arnón. Mira, yo pongo en tus manos a Sijón, el amorreo, rey de Jesbón, y todo su país. Comienza la conquista; provócale al combate. (Deuteronomio 2, 24)

  • El día que estabas en el Horeb en presencia de Yahveh tu Dios, cuando Yahveh me dijo: «Reúneme al pueblo para que yo les haga oír mis palabras a fin de que aprendan a tenerme mientras vivan en el suelo y se las enseñen a sus hijos», (Deuteronomio 4, 10)

  • Cuando levantes tus ojos al cielo, cuando veas el sol, la luna, las estrellas y todo el ejército de los cielos, no vayas a dejarte seducir y te postres ante ellos para darles culto. Eso se lo ha repartido Yahveh tu Dios a todos los pueblos que hay debajo del cielo, (Deuteronomio 4, 19)


“Submeter-se não significa ser escravo, mas ser livre para receber santos conselhos.” São Padre Pio de Pietrelcina