Encontrados 91 resultados para: tomaron

  • se levantaron todos los valientes y caminando durante toda la noche, tomaron del muro de Bet San el cuerpo de Saúl y los cuerpos de sus hijos y llevándolos a Yabés los quemaron allí. (I Samuel 31, 12)

  • Tomaron sus huesos y los sepultaron bajo el tamarisco de Yabés y ayunaron siete días. (I Samuel 31, 13)

  • Y David dio una orden a sus muchachos, que los mataron, les cortaron las manos y los pies y los colgaron junto a la alberca de Hebrón. Tomaron la cabeza de Isbaal y la sepultaron en el sepulcro de Abner, en Hebrón. (II Samuel 4, 12)

  • El rey y todo el pueblo que iba con él, llegaron extenuados a... y allí tomaron aliento. (II Samuel 16, 14)

  • Tomaron a Absalón, le echaron en el bosque en un gran hoyo y pusieron encima un gran montón de piedras; y todo Israel huyó, cada uno a su tienda. (II Samuel 18, 17)

  • Habían partido de Madián y llegaron a Farán, tomaron consigo hombres de Farán y llegaron a Egipto, donde Faraón, rey de Egipto, que le dio casa, le prometió sustento y le dio tierras. (I Reyes 11, 18)

  • Tomaron el novillo que les dieron, lo prepararon e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: «¡Baal, respóndenos!» Pero no hubo voz ni respuesta. Danzaban cojeando junto al altar que habían hecho. (I Reyes 18, 26)

  • Cuando Ben Hadad escuchó esta palabra, estaba bebiendo con los reyes en la tienda, y dijo a sus servidores: «Tomad posiciones.» Y tomaron posiciones contra la ciudad. (I Reyes 20, 12)

  • Los hombres lo tomaron como buen augurio y se apresuraron a tomarle la palabra diciendo: «Hermano tuyo es Ben Hadad.» El dijo: «Id a traerlo.» Ben Hadad salió hacia él, y él le hizo subir a su carro. (I Reyes 20, 33)

  • Tomaron dos tiros de caballos y los envió el rey en pos de los arameos diciendo: «Id y ved.» (II Reyes 7, 14)

  • En llegando la carta, tomaron a los hijos del rey y degollaron a los setenta, pusieron sus cabezas en cestas y se las enviaron a Yizreel. (II Reyes 10, 7)

  • Isaías dijo: «Tomad una masa de higos.» La tomaron, la aplicaron sobre la úlcera y sanó. (II Reyes 20, 7)


“Mesmo quando perdemos a consciência deste mundo, quando parecemos já mortos, Deus nos dá ainda uma chance de entender o que é realmente o pecado, antes de nos julgar. E se entendemos corretamente, como podemos não nos arrepender?” São Padre Pio de Pietrelcina