Encontrados 511 resultados para: tiempo

  • El tiempo que reinó sobre Israel fue de cuarenta años. En Hebrón reinó siete años y en Jerusalén 33. (I Crónicas 29, 27)

  • se hacían oír al mismo tiempo y al unísono los que tocaban las trompetas y los cantores, alabando y celebrando a Yahveh; alzando la voz con las trompetas y con los címbalos y otros instrumentos de música, alababan a Yahveh diciendo: «Porque es bueno, porque es eterno su amor»; la Casa se llenó de una nube, la misma Casa de Yahveh. (II Crónicas 5, 13)

  • Todas las copas de beber del rey Salomón eran de oro, y toda la vajilla de la casa «Bosque del Líbano» era de oro fino. La plata no se estimaba en nada en tiempo del rey Salomón. (II Crónicas 9, 20)

  • Se acostó Abías con sus padres y le sepultaron en la ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Asá. En su tiempo el país estuvo en paz durante diez años. (II Crónicas 13, 23)

  • Durante mucho tiempo Israel estará sin verdadero Dios, sin sacerdote que enseñe y sin ley. (II Crónicas 15, 3)

  • En aquel tiempo el vidente Jananí fue donde Asá, rey de Judá, y le dijo: «Por haberte apoyado en el rey de Aram, y no haberte apoyado en Yahveh tu Dios, por eso se ha escapado de tu mano el ejército del rey de Aram. (II Crónicas 16, 7)

  • Así se rebeló Edom de bajo la mano de Judá hasta el día de hoy. Por ese mismo tiempo se rebeló Libná de bajo su mano, porque había abandonado a Yahveh, el Dios de sus padres. (II Crónicas 21, 10)

  • Y al cabo de cierto tiempo, al fin del año segundo, se le salieron las entrañas a causa de su enfermedad, y murió en medio de terribles dolores. El pueblo no le encendió fuego, como lo había encendido por su padre. (II Crónicas 21, 19)

  • En aquel tiempo el rey Ajaz envió mensajeros a los reyes de Asiria para que le socorriesen. (II Crónicas 28, 16)

  • Aun en el tiempo del asedio, el rey Ajaz persistió en su rebeldía contra Yahveh. (II Crónicas 28, 22)

  • ya que no fue posible celebrarla a su debido tiempo, porque los sacerdotes no se habían santificado en número suficienté y el pueblo no se había reunido en Jerusalén. (II Crónicas 30, 3)

  • Los israelitas que se hallaban allí celebraron en ese tiempo la Pascua y la fiesta de los Azimos durante siete días. (II Crónicas 35, 17)


“A meditação não é um meio para chegar a Deus, mas um fim. A finalidade da meditação é o amor a Deus e ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina