Encontrados 207 resultados para: servicio sagrado

  • Había también cantores, cabezas de familia de los levitas y moraban en las habitaciones de la Casa, exentos de servicio, pues se ocupaban de día y de noche en su ministerio. (I Crónicas 9, 33)

  • David estableció los levitas que habían de hacer el servicio delante del arca de Yahveh, celebrando, glorificando y alabando a Yahveh, el Dios de Israel. (I Crónicas 16, 4)

  • ¡Rendid a Yahveh la gloria de su Nombre! Traed ofrendas y en sus atrios entrad. ¡Postraos ante Yahveh en esplendor sagrado! (I Crónicas 16, 29)

  • De éstos, 24.000 estaban al frente del servicio de la Casa de Yahveh; 6.000 eran escribas y jueces, (I Crónicas 23, 4)

  • Estos son los hijos de Leví, según sus casas paternas, los cabezas de familia, según el censo de ellos, contados nominalmente uno por uno. Estaban encargados del servicio de la Casa de Yahveh desde la edad de veinte años en adelante. (I Crónicas 23, 24)

  • Y en cuanto a los levitas, ya no tendrán que transportar la Morada, con todos los utensilios de su servicio.» (I Crónicas 23, 26)

  • Estaban a las órdenes de los hijos de Aarón, para el servicio de la Casa de Yahveh, teniendo a su cargo los atrios y las cámaras, la limpieza de todas las cosas sagradas y la obra del servicio de la Casa de Dios; (I Crónicas 23, 28)

  • guardando en el servicio de la Casa de Dios el ritual de la Tienda del Encuentro, el ritual del santuario y el ritual de los hijos de Aarón, sus hermanos. (I Crónicas 23, 32)

  • David y los jefes del ejército separaron para el servicio a los hijos de Asaf, Hemán y Yedutún, profetas, que cantaban con cítaras, salterios y címbalos. Este es el número de personas que se encargaban de este servicio: (I Crónicas 25, 1)

  • Todos ellos se hallaban bajo la dirección de su padre para el canto de la Casa de Yahveh, con címbalos, salterios y cítaras al servicio de la Casa de Dios, siguiendo las indicaciones del rey, de Asaf, Yedutún y Hemán. (I Crónicas 25, 6)

  • Echaron a suertes el turno del servicio, tanto el pequeño como el grande, el maestro como el discípulo. (I Crónicas 25, 8)

  • Todos estos eran hijos de Obededom; ellos y sus hijos y sus hermanos eran hombres de gran valor para el servicio. 62 de Obededom. (I Crónicas 26, 8)


“Que Nossa Senhora aumente a graça em você e a faça digna do Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina