Encontrados 91 resultados para: serás
Pero tú serás quebrantado en medio de incircuncisos y yacerás con las víctimas de la espada. (Ezequiel 32, 28)
y dejaré en ruinas tus ciudades; serás una desolación, y sabrás que yo soy Yahveh. (Ezequiel 35, 4)
Como tú te alegraste cuando la heredad de la casa de Israel era una desolación, yo te trataré a ti de la misma manera. Serás una desolación, montaña de Seír, así como Edom entero, y se sabrá que yo soy Yahveh. (Ezequiel 35, 15)
Haré que circulen por vosotros los hombres, mi pueblo Israel. Tomarán posesión de ti, y tu serás su heredad, y no volverás a privarles de sus hijos. (Ezequiel 36, 12)
«Serás arrojado de entre los hombres y con las bestias del campo morarás; hierba, como los bueyes, tendrás por comida, y serás bañado del rocío del cielo; siete tiempos pasarán por ti, hasta que reconozcas que el Altísimo domina sobre el imperio de los hombres y que se lo da a quien le place. (Daniel 4, 22)
De entre los hombres serás arrojado, con las bestias del campo morarás; hierba como los bueyes tendrás por comida, y siete tiempos pasarán por ti, hasta que reconozcas que el Altísimo domina sobre el reino de los hombres, y se lo da a quien le place.» (Daniel 4, 29)
He oído decir que tú puedes dar interpretaciones y resolver dificultades. Si, pues, logras leer este escrito y declararme su interpretación, serás vestido de púrpura, llevarás al cuello un collar de oro, y mandarás como tercero en el reino.» (Daniel 5, 16)
por la violencia contra Jacob tu hermano, te cubrirá la vergüenza, y serás extirpado para siempre. (Abdías 1, 10)
¿Retuércete y grita, hija de Sión, como mujer en parto, porque ahora vas a salir de la ciudad, y en el campo morarás. Llegarás hasta Babel, y allí serás liberada, y allí te rescatará Yahveh de la mano de tus enemigos. (Miqueas 4, 10)
También tú quedarás ebria, serás ésa que se esconde, también tú buscarás un refugio contra el enemigo. (Nahún 3, 11)
¿No se alzarán de repente tus acreedores, no se despertarán tus vejadores, y serás presa de ellos? (Habacuc 2, 7)
¿Quién eres tú, gran monte? Ante Zorobabel serás una explanada, y él extraerá la piedra de remate, a los gritos de «¡Bravo, bravo por ella!». (Zacarías 4, 7)